A Peña Santa, por la Canal Estrecha.

Echámos a andar a eso de las 13:13, tras dejar el coche en Cordiñanes. Buscamos , no sin equivocarnos un par de veces, el camino que sale desde la carretera que va a Caín, justo antes de la curva del mirador del Tombo, y que asciende por el Canal del Capozo hacia Vega Huerta.

La senda estaba bien  señalizada, al poco de comenzar por un cartel, y por hitos en todo su recorrido. Tras andar durante una hora, apenas habíamos cogido altura, no llegábamos a los 1000m. Pero en poco tiempo, tras salir del impresionante hayedo, el sedo se puso pindio de narices. Había momentos que pensaba que cada 4 o 5 pasos subíamos 1 metro!

Praderas colgantes, bóvedas, paredes de varios cientos de metros nos llevaron hasta prados azules repletos de liliums y cardos, jaja. Y a poco menos de una hora de Vega Huerta encontramos una fuente, de agua bien fría. Ya se podía ver la inmensa masa de roca caliza que es Peña Sta, agujas, placas, canalizos, neveros colgados, techos,… sobre un blanco mar de nubes.

Ya en Vega Huerta, unas fotos, un baño en el pilón que hay junto al refugio, según bajas, dejándolo a la izquierda. David y yo nos subimos a las Torres de Cotalbín (2187m) desde donde hay buena cobertura con Movistar y Yoigo.

Un atardecer tiñó de dorado y rojo las nubes, que hacían de falso suelo a los macizos central y occidental.

Tras él, una noche no demasiado fría y sin viento, dio paso a una mañana totalmente despejada. Amanecimos a las 7:15, desayunamos de tranki, jeje, y a las 7:45 nos pusimos en camino de la cara norte de Peña Sta. por el camino que va a Vega Redonda (V.R.)

El camino señalizado por marcas amarillas toma dirección Oeste, dejando siempre Peña Sta. mano derecha. Pasas un canchal hasta un colladín  desde el que ves un jou. Siguiendo las marcas amarillas, llegas a una bifurcación, al Oeste  (derecha) a V.R. sl Noroeste (bordeando el jou u dejándolo a la izqd) a V.R. y a la Forcadona. Tomamos la dirección NO y como a mitad de jou seguimos las marcas amarillas que ascienden por el agotador canchal. Cuando llegamos a la Forcadona, había un nevero del 15, al que nos tuvimos que subir , con mucho tiento, y atravesar hasta el Jou Santo.

En el Jou Santo, la ruta normal es bajar , por el nevero, hasta que encuentras los primeros hitos y marcas amarillas. En un vivac, dejámos una mochila y el mayor peso, sólo subimos con unos frutos secos, agua, la cámara, los móviles, los arneses, la cuerda de 30m (mejor una de 60m) y material para rapelar.

Comenzamos a ascender por la Canal Estrecha y al poco encontramos a un grupo de 5 personas que estaban haciendo la misma ruta que nosotros. Tras unas primeras trepadas de III, la canal se estrecha y hubo que asegurar algún paso, desde los múltiples rápeles que hay montados. 

Salimos a la Brecha Norte, sin perder en ningún momento las marcas amarillas, y llegamos a otra bifuración, al final tiramos por las llambrias, que aunque son más difíciles III, había menos patio que por la arista, II, que era por donde  te mandaban las flechas amarillas. Una última trepada y cima a 2596m.!!!

Ahí estaba el hito tumbado y el vivac en la cumbre... Después de más de un año con este proyecto, apenas lo disfruté, pensando en cómo se nos daría la bajada.

Pero la verdad es que nos vino Dios a ver, porque el grupo que iba delante de nosotros era muy majo y bajamos juntos. Pues el tirar una piedra por la canal o bloquearse no podía tener lugar.

Con Rosa Fdez.. a la cabeza, dirigiendo al grupo, decidiendo los rápeles, y haciendo el papel de una verdadera líder. Salva, Raquel, David, Ana, David y yo, bajamos como tiros de esa montaña.

Continuamos juntos por el caos de rocas del Jou Santo hasta que ellos se desviaron a V.R. y nosotros hacia el Boquete.

Una vez en el Boquete, comimos y a eso de las 16:20, enfilamos el sedo (marcados por los hitos más grandes) que serpentea por la Canal de Mesones a bajo. Era una autopista, porque se respira de otra manera por una senda ensuciada por las botas, de otros, que como nosotros, decidieron conocer una nueva canal.

El Sedo que nosotros tomamos, al principio no desciende muy rápido, serpentea mucho y  de él parten continuamente variantes y caminos secundarios que te pueden despistar. Ahora entiendo a aquellos que dicen que más valen pocos hitos y bien puestos, que tantos hitos pequeños en todos los caminos.

Tras pasar una capa de niebla, por fin vimos Caín y poco más abajo llegamos a las Majadas de Mesones!! Ya estaba hecho, aunque aún nos quedaban por salvar 1000m. de desnivel, bajamos como tiros y a eso de las 19:30 llegamos por fin a Caín.

Allí nos recibe una señorina, con un diente y 4 perros por escolta, nos pregunta por unas cabras que habíamos vista en el Jou de La LLerona. Mi madre como tenga que subir hasta allí!!! Nos indica el sedo hasta Caín de abajo, donde una amable pareja de jóvenes alemanes; nos recogen en un Micra cargado hasta los topes y nos acercan hasta Cordiñanes. Y menos mal porque si no, hubiesen sido 400m. de subida y más de 1 h. de pateada.

Peña Sta. con sus casi 2600m. no es una sencilla de subir, los caminos de aproximación a su cara más fácil de subir, discurren por un desierto de piedra caliza, canchales, neveros helados y se entrecruzan con otras sendas que te pueden confundir hasta en el día más soleado del año.